El día 15 de noviembre el consejero de Industria del Gobierno de Aragón Don Rafael Fernandez de Alarcón nos convoca a una reunión en el Ayuntamiento de Huesca a la que asisten, bajo la presidencia de la alcaldesa de la ciudad los posibles futuros actores del aeropuerto. Todo el mundo parece asumir que su futuro como aeropuerto ligado a los vuelos regulares parece imposible, en su lugar, el Consejero parece optar por los vuelos «irregulares» (charters) que se tendrán que concretar en diferentes opciones de paquetes turísticos y por la formación de pilotos.
El director de aeropuertos de la zona este de AENA confirma estas iniciativas, y asegura que por parte de AENA, (el gestor de la infraestructura) se sigue invirtiendo en ella. Cita como ejemplo la próxima reubicación de la torre de control que con una inversión de 93.000 euros viene a solucionar el problema de la falta de visibilidad de los planeadores. Los representantes de AENA se confiesan confiados en su futuro, aunque refiriéndose a los recientes abandonos de Pyrenair y TopFly que han dejado al aeropuerto sin más actividad que los planeadores del Aeroclub Nimbus afirman que «hemos tenido un infarto y ahora nos estamos recuperando». Como continuación a este diagnóstico, estos mismos representantes confirman las impresiones del Sr. Consejero, es decir, el aeropuerto tiene que fijar sus objetivos en usos distintos a los vuelos regulares de pasajeros, entre ellos relacionan la búsqueda de nuevos mercados a quienes vender paquetes turísticos que no se concentren únicamente en el turismo de invierno y también la formación de pilotos.
Tras esta intervención el Sr. Consejero da la palabra a los invitados a la mesa comenzando por los representantes de Pyrenair, Turismo de Aragón, Cámara de Comercio y Aramón en las que se ponen de manifiesto opiniones contradictorias. Mientras el representante de Pyrenair afirma el escaso interés que las autoridades han demostrado por el aeropuerto o las dificultades que supone traer aviones de pasajeros a un aeropuerto sin taxis ni autobuses, el de Aramón confirma que en algunas ferias extranjeras a las que había acudido, el producto ofrecido por Pyrenair llegaba a ser el más caro del mundo hasta el punto de que para un esquiador británico llegaba a ser más económico pasar una semana de nieve en Canadá que en Formigal. El Sr. Guedea, presidente de Aramón afirmaba igualmente la dificultad de entrar en un mercado que empezaba a competir con las recientes apariciones en el sector de alguno de los nuevas incorporaciones a la Unión Europea. No se llegaron a conclusiones significativas si bien el Sr. Consejero manifestó su compromiso de conseguir que el aeropuerto dispondría de servicio de taxi cuando sean necesarios.
Finalmente el Sr. Consejero dio la palabra a los representantes de los únicos usuarios actuales del aeropuerto (además del helicóptero de rescate de la Guardia Civil) quienes refiriéndose a las declaraciones de los representantes de AENA se lamentaron de que entre los objetivos de futuro planteados por el mismo no se encuentra el Vuelo sin Motor ya que ni siquiera se ha nombrado a dicha actividad. El Sr. Ferreira se refirió al informe del Director de Seguridad de Aeronaves de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea en el que afirmaba que debido a un diseño incorrecto del campo de vuelos la actividad del vuelo sin motor no era compatible con ningún otro uso que se le quisiese dar al aeropuerto. A estas afirmaciones respondió el Sr. Consejero argumentando que no era el momento de exhibir dicho informe por no tratarse de un foro técnico recomendando que no fuese repartido entre los asistentes. El representante de AENA contestó afirmando que el director general de seguridad de aeronaves de la Agencia Estatal de Seguridad Aerea no es competente para la realización de este tipo de informe exhibiendo las conclusiones de un segundo informe en el que se afirma que la actividad es posible siempre y cuando no exista ningún otro uso, lo cual, supone en opinión de los deportistas una reanimación de las tesis del informe inicial.
Las intervenciones se cerraron con las palabras del Sr. Lorente, Presidente del Aeroclub Nimbus que expuso a los asistentes la problemática que implicaba el traer al aeropuerto grupos de deportistas que él compara con los esquiadores que traía Pyrenair. Lorente comenta que para los usos habituales de un aeropuerto, la propia instalación no es en si misma un destino sino solamente el inicio o el final de una aventura y que por tanto lo que se persigue es que la instalación sea cómoda y que el usuario pase en ella el menor tiempo disponible. En contrapartida a ello, Lorente afirma que el Vuelo sin Motor implica que la instalación tiene que ser capaz de funcionar como una instalación deportiva en la que sus practicantes puedan pasar el día en el campo de vuelos, moviéndose por el mismo libremente, a pie o en los vehículos de los que disponen para ir a buscar los planeadores que quedan inmóviles y sin capacidad de movimiento por si mismos mientras no se acude a recogerlos.
Tras estas palabras y en ausencia del Sr. Consejero fue el Director General de Transportes del Gobierno de Aragón el encargado de dar por concluida la sesión a la que no se llegó a más conclusiones que la de constituir con los asistentes un grupo de trabajo que se reuniría de manera periódica para tratar del futuro de la instalación.